La oficina del alcalde de Medellín tomó decisiones cruciales frente a la crisis provocada por las fuertes lluvias, que aún continúan generando efectos adversos en la ciudad. A medida que las condiciones climáticas se deterioran, es evidente que se requieren medidas urgentes para abordar la situación que muchos vecinos están enfrentando.
En la noche del martes 29 de abril, El alcalde Federico Gutiérrez anunció la desgracia pública, permitiendo al distrito actuar de manera rápida y eficiente para mitigar y participar en los daños causados por estos fenómenos naturales que han afectado diferentes sectores de la ciudad. Esta declaración es un paso importante para brindar asistencia a quienes más lo necesitan en momentos críticos.
La decisión se tomó tras una evaluación exhaustiva durante un extraordinario asesoramiento sobre la gestión de riesgos para desastres, donde se abordaron múltiples situaciones de crisis que estaban surgiendo en varias zonas de Medellín. Con esta información, el alcalde y su equipo pudieron planificar una respuesta adecuada y efectiva.
«Nos vemos obligados a utilizar este instrumento para manejar esta crisis que ha surgido debido a una ola de invierno. Nuestra prioridad esencial es salvaguardar la vida de las personas. Ya hemos implementado planes de evacuación tanto temporales como definitivos», comentó Gutiérrez durante la rueda de prensa.
Muebles
Hasta el momento, el equipo técnico del Departamento de Gestión de Riesgos Catatrales (DAGRD) ha realizado un exhaustivo censo de más de 350 viviendas. De estas, 29 han sido clasificadas con recomendación temporal de evacuación, mientras que 229 han sido categorizadas para evacuación debido a las condiciones de riesgo severo en las que se encuentran.
Además, se ha identificado a más de 800 personas en las áreas afectadas y 141 familias han sido desplazadas a automóviles, mientras que 46 familias han sido reubicadas en hoteles proporcionados por el distrito. Esto muestra el grave impacto de las lluvias y la rapidez con la que las autoridades están respondiendo a la crisis humanitaria generada por este fenómeno natural.
Manzanillo Vereda, en Altavista Foto:Oficina de Medellín al alcalde
En términos de las actividades de supervisión y monitoreo en respuesta a la crisis, Gutiérrez destacó que se ha implementado un sistema de alarma en el valle de Aburrá para garantizar reacciones oportunas y coordinadas ante cualquier eventualidad. Esto muestra una mejor organización y preparación ante desastres naturales y los peligros que conllevan.
En los últimos dos meses, se ha registrado un 30 por ciento más de lluvia en comparación con los niveles normales para esta misma época del año. Este incremento en las precipitaciones ha llevado a un estado de alerta, ya que se espera que esta semana continúen las lluvias intensas y que estas condiciones persistirán a lo largo del mes de mayo, lo cual podría agravar aún más la situación en las áreas ya afectadas.
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La mujer muere y su hijo desaparece después de la lluvia Foto: