Una tragedia ha conmocionado al pueblo colombiano, especialmente en la región de Santa Marta. Este lunes, la policía nacional lanzó un comunicado confirmando el descubrimiento de las partes restantes del cuerpo de Alessandro Coatti, un ciudadano italiano que fue asesinado en circunstancias todavía confusas que permanecen sin aclarar. Este hallazgo se llevó a cabo en el contexto de una investigación que ha suscitado el interés y la inquietud tanto a nivel local como internacional.
El resto del cuerpo fue encontrado cerca del río Manzanares, completando así la macabra escena del crimen de la víctima. Anteriormente, los dedos, la cabeza y los pies de Coatti habían sido hallados en una maleta abandonada, lo que resultó en un descubrimiento aún más escalofriante.
El Coronel Jaime Ríos, quien es el comandante de la policía metropolitana de Santa Marta, declaró que este aterrador descubrimiento fue posible gracias a la colaboración de ciudadanos que aportaron información útil. Esto resalta la importancia de un trabajo conjunto en la lucha contra el crimen.
Estamos recopilando cada evidencia posible y deseamos ofrecer respuestas rápidas tanto a la familia del Sr. Coatti como a la comunidad samaria, que también ha sido profundamente impactada por este crimen.
Coronel Jaime RíosComandante de la policía metropolitana Santa Marta
El coronel Ríos también hizo énfasis en el premio de 50 millones de pesos colombianos (aproximadamente $13,000) que se ofrece a quienes puedan proporcionar información crucial que lleve a la captura de los responsables de este horrendo acto.
Una travesía marcada por la cultura y la ciencia
El científico italiano Alessandro Coatti fue asesinado en Santa Marta.Foto:Redes sociales
Alessandro Coatti, un joven de 35 años, había llegado a Colombia el 3 de abril en el marco de un viaje cultural por América del Sur, que también incluyó visitas a Ecuador y Bolivia. Durante su estancia en Ecuador, trabajó como voluntario en un proyecto ambiental, y en Bolivia participó en el grupo de danza «Caporales San Miguel», que estuvo presente en el famoso festival de Oruro. Tras una travesía por Bogotá y Medellín, llegó a Santa Marta, donde se hospedaba en el Historic Center Hostel.
El 4 de abril, un día después de su llegada a Santa Marta, Alessandro reportó desaparecido. Su desaparición pasó desapercibida hasta que un grupo de niños que jugaban en una zona boscosa cercana al Estadio Sierra Nevada tropezó con una maleta que contenía restos humanos. La identificación del cuerpo fue posible gracias a un rastreo que reveló pertenecía al albergue donde se alojaba, con una de las extremidades aún visible.
La investigación avanza, pero el misterio permanece
Desde el inicio de la investigación, las autoridades han contado con el apoyo de la comunidad local. Según el Coronel Ríos, esta colaboración ha permitido reunir información clave. Sin embargo, hasta el momento, no se ha realizado ninguna captura y el móvil del crimen sigue sin aclararse.
Santa Marta se sitúa en un área conocida por la presencia de grupos armados ilegales, como las Autodefensas Conquistadores de Sierra (ACS), un grupo con conexiones paramilitares que recientemente rompió el diálogo de paz con el gobierno nacional. Aunque inicialmente se especuló sobre su posible implicación, el grupo emitió un comunicado negando cualquier relación con el asesinato del ciudadano italiano.
Los titulares de prensa en Italia sobre la trágica muerte de Alessandro Coatti.Foto:Archivo privado
La familia de Alessandro Coatti ha pedido apoyo diplomático a Italia, y tanto la embajada italiana en Bogotá como Interpol han sido informadas sobre la situación. Por el momento, las autoridades colombianas continúan con la investigación, mientras la presión pública aumenta para esclarecer este crimen, que ha generado una profunda reflexión sobre la percepción de seguridad nacional e internacional.
«Es un hecho doloroso que nos recuerda los peligros que enfrenta nuestra sociedad. No descansaremos hasta que logremos identificar y capturar a los autores de este atroz acto», declaró el Coronel Ríos. La historia de Alessandro Coatti, un apasionado de la naturaleza y las diversas culturas del mundo, fue truncada de manera violenta. Ahora, su nombre se ha convertido en un símbolo de la urgente necesidad de justicia y de garantías para los viajeros que llegan a Colombia, buscando explorar y conectar con el espíritu de la hermandad.