El comunicado de Ríos para los seguidores de los millonarios, tras el sorteo.

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Juan David Ríos protagonizó una noche sumamente intensa en el Estadio Campín. El volante del Pereira se convirtió en el centro de atención no solo por su actuación en el campo, sino también por su atrevida interacción con los fervientes aficionados millonarios. Durante el transcurso del juego, distintas secciones del estadio lo llamaron en repetidas ocasiones, lo que intensificó la atmósfera de tensión en el recinto deportivo. El jugador, claramente molesto por la situación, respondió a los aficionados con gestos que se hicieron evidentes en la cancha.

Sin embargo, la atmósfera se tranquilizó considerablemente cuando el árbitro pitó el final del partido. Posteriormente, Ríos se dirigió a la zona mixta para atender a los medios de comunicación y explicó su perspectiva sobre el incidente. «Esas cosas están ahí», mencionó al ser consultado sobre su reacción hacia los seguidores. Aunque el volante prefirió no profundizar en el tema, dejó muy claro que su compromiso con el club se mantiene intacto y efectiva.

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En términos de desempeño deportivo, Ríos reconoció que el equipo tiene mucho por mejorar si aspira a avanzar en la competición. «Estamos vivos, pero tenemos que proponer más. Tienes que ir al ataque si queremos clasificar», enfatizó. El centrocampista identificó los próximos partidos como cruciales para el futuro del Pereira. «Esperamos ganar en casa. Dado que hay vida, tienes que seguir luchando».

Los millonarios enfrentarán una dura batalla por clasificar en las últimas jornadas del formato de todos contra todos. Ríos proyectó que el mínimo umbral para asegurar un lugar entre los ocho clasificados será de 31 o 32 puntos. «Tenemos que ganar lo que queda», manifestó con plena convicción, dejando en claro que no se rendirán tan fácilmente.

No oculta la esperanza en la clasificación a pesar del empate con millonarios

El jugador también expresó su agradecimiento hacia los seguidores que continúan apoyando al equipo. No escondió la frustración por no haber conseguido los tres puntos, pero reiteró que el grupo no bajará los brazos y seguirá luchando en cada encuentro. Esta actitud refleja la resiliencia del equipo, así como la lealtad y el compromiso con la causa que defienden.

Se debe señalar que la relación entre los jugadores y la hinchada ha sido tensa en los últimos tiempos. Ríos, en particular, simboliza parte de esa presión que proviene de la afición, pero también lleva consigo la responsabilidad del liderazgo que este momento crítico exige. Es importante recordar que ya había tenido un enfrentamiento con los millonarios previamente, lo que añade otra capa de complejidad a su situación actual.

Eldeportivo.com.co

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