Bogotá, 7 de mayo (Efe).– La escritora y activista estadounidense Virgie Tovar, reconocida como una de las voces más poderosas en la lucha contra la girofobia, compartió en una entrevista con Efe su perspectiva sobre los desafíos que enfrentan las mujeres de grandes cuerpos, tanto en Colombia como en el resto de América Latina. Según Tovar, estas mujeres no únicamente lidian con estigmas sociales, sino que también enfrentan serias barreras estructurales, similares a las que se observan en su país natal.
Durante su visita a Bogotá, donde participó en la Feria Internacional de Libros (Filbo), Tovar explicó: «A menudo, los problemas no solo giran en torno a los estándares de belleza, sino que también se relacionan con cuestiones fundamentales, como la capacidad de una persona para sentarse en un autobús, recibir atención médica adecuada o incluso acceder a una vacunación con el tipo de aguja que realmente necesitan». Su observación pone de relieve la importancia de considerar el acceso y la dignidad en un contexto más amplio.
Tovar, quien es la autora del destacado libro ‘Tienes derecho a recordar grasa’, ha vivido en carne propia las luchas relacionadas con los trastornos alimentarios y la intensa presión social para perder peso desde una edad temprana. Al reflexionar sobre su propio viaje, Tovar ha llegado a entender que, después de años de realizar dietas y de una intensa autoevaluación, encontró en el feminismo y el activismo una nueva forma de resignificar su relación con su cuerpo. Esto la ha impulsado a denunciar las estructuras que perpetúan la opresión hacia las personas gordas.
Más honestidad en América Latina
Un aspecto que sorprendió a Tovar fue la recepción entusiasta de su libro en el ámbito hispanohablante: «No tenía idea de que se traduciría al español o de que tendría un impacto significativo en los círculos feministas en países como Colombia o Chile», comentó visiblemente emocionada sobre la trascendencia de su obra.
En Bogotá, ha tenido la oportunidad de reunirse con grupos como la Fundación ‘Gordas sin chaquetas’, además de colaborar con otros activistas del movimiento corporal en Latinoamérica. Este intercambio no solo enriquece su perspectiva, sino que también fomenta un sentido de comunidad entre aquellos que luchan por la aceptación de los cuerpos diversos.
Asimismo, Tovar destacó la influencia innegable que los escritores latinoamericanos han ejercido sobre su propio trabajo. Admiró su habilidad para tratar el tema del cuerpo desde una perspectiva más honesta y directa que la que comúnmente se encuentra en la literatura estadounidense, señalando que «los escritores latinoamericanos han sido sumamente influyentes, ya que abordan el cuerpo de una manera que percibo como más auténtica».
En cuanto a su experiencia en Colombia, Tovar mencionó que, aunque no ha experimentado ninguna discriminación directa durante su estancia, ha escuchado varios testimonios que confirman la existencia de una gordura estructural. Además, criticó la práctica de las compañías farmacéuticas que realizan pruebas de medicamentos, como Ozempic, en campañas en América Latina antes de introducirlos en Estados Unidos. «Es completamente indignante experimentar con esta región como si fuera un laboratorio», expresó, dejando claro su rechazo hacia estas prácticas.
Finalmente, Tovar está programada para ofrecer una charla en Popayán, en el suroeste de Colombia, donde abordará los temas centrales de su libro y el derecho fundamental de todos los cuerpos a ser habitados con dignidad. Las ideas que comparte son cruciales en la lucha por un mundo más inclusivo y donde la diversidad corporal sea celebrada, no estigmatizada.