Las operaciones militares y policiales que se llevan a cabo en Buenaventura, dentro del marco del plan de choque desarrollado en el Valle del Cauca, son una manifestación clara de la determinación del Estado en enfrentar al crimen organizado en esta región del país. Este enfoque no es simplemente un acto aislado, sino una estrategia más amplia para combatir la violencia y la ilegalidad que han prevalecido en el área durante años.
Recientemente, se llevaron a cabo varias operaciones contra organizaciones criminales que operan en el puerto, demostrando el compromiso de las autoridades locales. El último operativo resultó en la captura de cuatro individuos, quienes supuestamente pertenecen al grupo delictivo conocido como «Shottas». Este desarrollo es significativo, pues refleja el impacto positivo de la estrategia de seguridad en el área.
No obstante, lo que sorprendió a muchos fue el hecho de que dos de los detenidos formaban parte de la mesa socio-política conformada por el gobierno nacional, que busca alcanzar un acuerdo de paz con los «espartanos», otra agrupación criminal que ha sido responsable de numerosas muertes y actos violentos en la región del Pacífico. Este detalle pone de relieve la complejidad del problema del crimen organizado en Buenaventura, donde los lazos entre las organizaciones delictivas y la política son difíciles de desentrañar.
Las autoridades se esfuerzan por afectar a los grupos ilegales que operan en la región. Foto:Gobierno del valle del Cauca
El gobernador del Valle del Cauca, Dilli Francisca Toro, destacó la importancia de estos arrestos, afirmando: «Dos de estas personas detenidas actuaban como portavoces en esta mesa y actualmente están privadas de la libertad. Es crucial subrayar que aquellos que verdaderamente desean la paz la obtendrán, mientras que quienes perpetúan crímenes serán apresados». Este comentario refleja la postura del gobierno respecto a la lucha contra la delincuencia y su deseo de dialogar con aquellos que estén dispuestos a renunciar a la violencia.
Impacto en las economías ilegales de la región
En una operación realizada de manera conjunta y coordinada entre unidades del Ejército Nacional, la Armada colombiana, la Fuerza Aérea Colombiana y la Policía Nacional, se logró la neutralización de dos unidades de producción ilícita ubicadas en las zonas rurales de la comuna de Buenaventura. Este tipo de intervenciones son vitales para desmantelar las economías ilegales que alimentan el crimen organizado en el área.
Según las autoridades, el impacto financiero de estas operaciones es significativo, estimándose que alcanza cerca de 5400 millones de pesos anuales, afectando directamente a la estructura de «Jaime Martínez», un disidente de las FARC que opera en la región bajo un alias asociado a la criminalidad.
Durante la intervención, los operativos lograron ocupar y destruir, de manera controlada, elementos tales como tres retroexcavadoras, dos canales de drenaje y dos motobombas. Estos equipos estaban en funcionamiento en actividades mineras ilegales, y se estima que tenían una capacidad de producción mensual de aproximadamente 1500 gramos de oro, representando así pérdidas directas de más de 1,8 mil millones de pesos mensuales para estas economías ilegales.
Además, se ha evidenciado que estas operaciones mineras clandestinas estaban vertiendo unas 55 toneladas de mercurio al mes en el río Dagua, lo que representa un grave impacto ambiental y una amenaza para la salud de las comunidades que residen en las cercanías de estos cuerpos de agua. Este tipo de contaminación no solo afecta a la fauna y flora local, sino que también pone en riesgo la salud pública a largo plazo.
Estructura minera ilegal en las zonas rurales de Buenaventura Foto:Gobierno del valle del Cauca
Operativos contra el grupo 57 «Yair Bermúdez»
Por otra parte, el departamento de policía del Valle también informó sobre un asalto exitoso al frente 57 «Yair Bermúdez» del grupo disidente de las FARC, operando en el distrito moral de Tuluá. Durante este operativo, fueron capturados dos de sus miembros, quienes aparentemente ejercían presión sobre comerciantes de la localidad.
Según declaraciones del coronel Sandra Liliana Rodríguez, comandante de la policía del Valle, uno de los detenidos es alias Cristian, conocido por ser uno de los principales extorsionadores en la comuna «del corazón» del Valle del Cauca.
En el marco de la operación se encontró un arma de fuego y, más alarmantemente, dos explosivos improvisados que eran utilizados para intimidar a los comerciantes y a los residentes de la zona. Esto pone de manifiesto la peligrosidad de los grupos criminales que operan en la región.
Además, el gobierno ha implementado una bolsa de recompensas para información que permita desarticular actividades terroristas, donde la participación y colaboración de la ciudadanía es vital en la lucha contra el crimen.
Puede interesarle
Laura Sarabia tuvo una reunión con el Ministro de Asuntos Exteriores Wang Yi Foto: