En un trágico incidente ocurrido en la comuna de La Plata, situada en el departamento de Huli, un ataque devastador con explosivos dejó a la comunidad en estado de shock. Este ataque fue parte de un enfrentamiento que involucró a grupos violentos diversos, lo que resultó en dos muertes y 33 heridos de diversas edades y condiciones.
Las autoridades locales han señalado que el autor intelectual de este siniestro ataque es conocido por el apodo de «mordedura iván». Según informes, una motocicleta fue cargada con explosivos y detonada justo en el momento en el que una familia estaba celebrando un cumpleaños, ensombreciendo lo que debería haber sido un día festivo.
Nueve integrantes de la familia se reunieron para la celebración. Foto:Foto: Redes sociales
Entre los nueve miembros de la familia presentes en el lugar, los jóvenes Luis Fernando, de 20 años, y Sergio, de 17 años, fallecieron de manera instantánea en la explosión. Los heridos incluyen a otros parientes, entre los cuales se reporta la gravedad de un niño menor de 10 años, quien fue trasladado a la Unidad de Cuidados Intensivos pediátricos.
En una conmovedora conversación con «Caracol Radio», Jesús Lagos, hermano de las víctimas, relató el desgarrador momento en el que tuvo que identificarlos en el Centro Médico. Reconoció que desde entonces ha estado trabajando como guardaespaldas, una forma de tratar de sobrellevar la situación.
«No hay palabras que puedan describir la agonía que sientes, especialmente cuando intentas recogerlos en el hospital», expresó Jesús a la mencionada emisora.
Él también declaró con firmeza que sus hermanos no estaban involucrados en actividades violentas en la comuna; por el contrario, los describió como jóvenes razonables y bien intencionados.
«No comprendo por qué en esta guerra absurda se ven implicados inocentes,» comentó Jesús durante su aparición en «Caracol Radio».
El cuerpo no fue entregado a sus familiares
Momentos antes de la explosión, la familia celebraba un cumpleaños. Foto:Entregado.
Los reportes de los medios indican que para el sábado por la tarde, los familiares aún no habían recibido información sobre el paradero de los cuerpos de Luis y Sergio.
«Nuestros hijos han sido asesinados de forma violenta, y ni siquiera hemos tenido la oportunidad de despedirnos,» manifestó Jesús Lagos Peña con profunda tristeza.
La familia ha expresado su descontento al señalar que, a pesar de las palabras de consuelo y apoyo ofrecidas por los políticos locales, no han recibido el apoyo necesario para afrontar la pérdida de sus seres queridos. De acuerdo a la información proporcionada por «Caracol Radio», la familia se ha visto frustrada porque la funeraria no pudo entregar los restos de las víctimas debido a la ausencia de una orden del fiscal que maneja el caso.
Finalmente, la familia ha insistido en que las autoridades deben proporcionar los restos de sus seres queridos a la brevedad posible, para poder ofrecerles una despedida digna.