La Semana Santa de este año se vio marcada por una serie de incidentes violentos en el Valle del Cauca. Uno de los eventos más alarmantes fue la explosión de una bomba en un automóvil que tuvo lugar en el área de Robles Corregimiento, ubicado en Jamundí, el día 17 de abril. Además, se reportaron actos de acoso contra la policía en la Comuné de Dagua, en la parte occidental de la región. Solo dos días más tarde, el 19 de abril, ocurrió otra explosión, esta vez en Cai El Rodeo, en el distrito del mismo nombre. Estos actos de violencia no solo inquietaron a la población local, sino que también ilustraron la continua lucha contra el crimen organizado en esta zona.
Sin embargo, la Semana Santa también fue testigo de operaciones significativas por parte de las fuerzas de seguridad, que llevaron a cabo cirugías contra las estructuras criminales establecidas en la región. Las autoridades reportaron avances importantes en la desarticulación de grupos armados ilegales, destacando la captura de alias Pablito o Chiquito de Tuluá, quien era considerado uno de los líderes del grupo criminal conocido como Adam Izquierdo.
AKA Pablito, de Tuluá, reconoció Catatumbo. Foto:Policía de valles
También conocido como Pablito o Chiquito de Tuluá
El gobernador del Valle, Dilian Francisca Toro, comentó que Pablito era una figura clave en la generación de problemas en las áreas rurales de las montañas centrales y occidentales. «Les dieron un golpe muy difícil para la desarticulación de su grupo», afirmó, subrayando la importancia de su captura para la seguridad en la región. Este individuo era responsable del asesinato de un ciudadano y se encontraba entre los más buscados por las autoridades.
Dilian también mencionó que la captura de alias Pablito tuvo un efecto dominó, ya que también se logró la detención de otros miembros relevantes del grupo criminal, como alias Michel y alias Gregorio, quienes estaban implicados en el reclutamiento ilegal de menores y extorsiones a los agricultores.
El coronel Pedro Astaiza, comandante de la Policía del Valle, comentó que existía una orden de arresto previa contra Pablito, solicitada por el Tribunal Penal Municipal de Baga, debido a su vinculación con actividades delictivas. Astaiza añadió que se le relacionaba con el grupo armado ilegal conocido como «personal general», que es considerado una disidencia de las FARC, y que opera en localidades como Tuluá y Sevilla.
La captura de alias Pablito y la incautación de materiales relevantes, como computadoras, han sido vitales en la investigación de esta organización criminal, y están ayudando a desmantelar el entramado criminal en el que se movían. Al mismo tiempo, estas acciones están enmarcadas dentro de un contexto mayor de desafíos que enfrentan las fuerzas de seguridad en su lucha contra el crimen organizado en la zona.
Tomando 620 kilogramos de marihuana en la Semana Santa, en Cartago, Valle. Foto:Policía de valles
Entre otras acciones, se destacó que la policía no solo ha buscado a los líderes visibles, sino que también ha impactado en el marco operacional y logístico de las organizaciones criminales en la región. «La captura de hoy de alias Pablito es un hito en nuestra lucha contra las estructuras criminales que operan en la comuna mencionada», concluyó el coronel Astaiza.
El alias Marra cae en Buenaventura; Los asesinatos están cayendo
En el marco de un plan de choque implementado en Buenaventura, también se logró la captura de alias Marra, un líder de la banda conocida como «Los Shottas», que está en oposición a «Los Espartanos». Esta detención se produjo en la comuna 10 y forma parte del esfuerzo del gobierno local por restaurar la paz en esta zona afectada por la violencia.
El gobernador Toro destacó que el plan de choque no solo ha resultado en capturas importantes, sino que también ha llevado a una disminución de los asesinatos en la región, con un descenso del 20 % en estos crímenes violentos. «El impacto de estas operaciones está comenzando a ser evidente, con una mayor sensación de seguridad entre los habitantes», dijo.
El gobernador Dillian Francisca Toro con el coronel Pedro Astaiza del valle de la policía. Foto:Gobierno del valle
Durante la Semana Santa, Buenaventura recibió a más de 80,000 visitantes, y la ocupación hotelera alcanzó un 38 %, lo que representa un ingreso económico significativo para la zona, estimado en $6 millones. Este resurgimiento turístico es una señal positiva, después de un largo período de inseguridad e incertidumbre.
El secretario de movilidad del Valle, Diego Murillo, también reportó que se llevaron a cabo 550 procedimientos durante la semana santa, destacando una reducción del 20 % en accidentes en comparación con el mismo período del año anterior. Además, se impusieron más de 1,500 multas durante esta temporada, lo que refleja un esfuerzo considerable por parte de las autoridades para garantizar la seguridad en las vías.